miércoles, 5 de junio de 2013

Hay alternativas, no al internamiento de inmigrantes (CIE)

J.S vino a España en 2001 con 13 años. Le trajeron sus padres y ha tenido permiso de residencia y trabajo hasta junio de 2012, en que no pudo renovarlo por no disponer de empleo. Ahora por fin tenía ya una oferta de trabajo y estaba gestionando la solicitud de renovación del permiso. Vive con su madre, que tienen nacionalidad española. J.S carece de antecedentes penales.

La policía le paró por la calle el pasado abril. Le pidieron los papeles y le llevaron a comisaría por no tener el permiso de residencia en vigor. Ingresó en el CIE al día siguiente sin tener siquiera la orden de expulsión todavía. 

En el CIE le notifican la orden de expulsión, que su abogado recurre ante el Juzgado inmediatamente y solicita la paralización urgente de la expulsión. El Juzgado paraliza la expulsión y J.S es finalmente puesto en libertad. 
Testimonio recogido en el CIE de Madrid
Todas las personas, incluidas las personas migrantes, tienen derecho a la libertad. Sin embargo, a las personas migrantes en situación irregular pueden pararlas, detenerlas y enviarlas a un centro de internamiento de extranjeros (CIE). Da igual si han vivido tiempo en España, si por la crisis han perdido su empleo y, como consecuencia, su permiso para permanecer en el país. No importa si tienen hijos o familia. Tampoco si están embarazadas, si tienen una enfermedad grave, o si son posibles refugiados o víctimas de trata. Se las priva de libertad sin valorar su situación personal. Su única falta: estar en situación irregular en España 

Desde inicios del 2012, el Ministerio del Interior prepara un reglamento para regular los CIE, lugares donde se han denunciado violaciones de derechos humanos. El Reglamento debe  garantizar el ejercicio de los derechos de las personas migrantes y contemplar medidas alternativas que no conlleven la privación de libertad.

La detención y el ingreso en un centro de internamiento de extranjeros (CIE) debe ser  una medida excepcional, una vez que se hayan agotado todas las medidas alternativas, después de una valoración individual de cada caso concreto. El internamiento debe ser siempre evitable y descartado cuando estamos ante personas vulnerables, mujeres víctimas de trata, niños o niñas.

Adhiérete al manifiesto de Amnistía Internacional, Andalucía Acoge, Grupo Inmigrapenal, Pueblos Unidos y Mugak Sos Racismo, pidiendo alternativas al internamiento de las personas migrantes.

Porque existen alternativas ¡Actúa!